Playa
Azul, Mich.- El 27 de febrero de 2011,
el blog INDICADOR del Puerto, (antecedente directo de este nuevo blog, El
Indicador del Balsas) realizó la cobertura de un esforzado intento por
establecer en Playa Azul, comunidad muy cercana a la portuaria Ciudad de Lázaro
Cárdenas, el “Festival de la Empanada”; un intento comunitario por promover el
turismo en ese destino de playa, al aprovechar la tradición de la venta en ese
sitio de las empanadas con relleno de dulce de coco.
Pero
el intento fracasó, como también lo hizo el malogrado Festival de la Quema del
Betula; otro propósito de la gente de Playa Azul para atraer visitantes a sus
extensa playa y cuya historia se ha diluido en el tiempo.
A
manera de mantener presente esa búsqueda de identidad que trascienda lo local y se proyecte a la región y aún más allá, es que reproducimos a
continuación la nota periodística de referencia, con la esperanza de que
finalmente Playa Azul encuentre un asidero para promover su atractivo con
mayor fuerza:
Playa
Azul presentó la empanada gigante en su primer festival del año
* El
primer tendido de la empanada mostró que sería descomunal.
*
Alejandra Anguiano, la Reina del Primer Festival de la Empanada de Playa Azul.
*
Algunos de los turistas esperaron a la orilla del mar la presentación final de
la obra de repostería que intentará superar el actual récord Guiness.
Lázaro
Cárdenas.- Cientos de piezas de unos 60 centímetros por lado aproximadamente,
conformaron la descomunal empanada de más de 500 metros lineales y arriba de
250 metros cuadrados, que panaderas y panaderos de Lázaro Cárdenas elaboraron
para intentar establecer una nueva marca mundial, como atractivo central del
Primer Festival de la Empanada en Playa Azul.
La
obra, emprendida por entusiastas miembros de la comunidad, no contará con el
registro oficial de Guiness debido a que se rebasó el tiempo límite para cubrir
los requisitos de este organismo. Con todo, la marca a vencer es la de una empanada
de 246 metros cuadrados elaborada en León, España.
Raúl
Magaña Solís, uno de los principales organizadores del evento, dijo al
anochecer de hoy, cuando aún faltaba una última horneada para dar por terminada
la gigantesca empanada, que seguramente se superaría el récord español
reconocido por Guiness, pero que, de lo contrario, cuando menos se igualaría.
Desde
temprana hora empezaron a acudir personas a la plaza principal de Playa Azul
para atestiguar el armado y presentación de la súper empanada; un acontecimiento
que demostró cómo los panaderos y panaderas locales y un grupo de
organizadores, con Raúl Magaña Solís, Sergio Omar García y Ángeles Salazar a la
cabeza, entre otros, fueron capaces de llevar a Playa Azul al interés no solo
local, sino estatal y nacional con este festival.
De
hecho, y a pesar de que hubo otros atractivos en este Primer Festival de la
Empanada en Playa Azul, fue el intento de romper la marca Guiness lo que atrajo
a este centro turístico a incontables visitantes.
Será
en breve cuando los organizadores aportarán las cifras exactas de la empanada,
pero fue posible conocer que en su elaboración participaron unas 30 personas,
quienes trabajaron durante cuatro días y tres noches, y utilizaron, cuando
menos 90 bultos de harina de 44 kilos cada uno, 36 latas de manteca de 25 kilos
cada unidad, 29 bultos de azúcar de 50 kilos, 360 kilos de piloncillo y casi
tres mil cocos, que constituyeron el relleno de la empanada.
De
acuerdo con el programa previsto, al término de la última horneada, que habría
ocurrido después de las 21 horas de hoy, se tomarían las medidas de esa
singular pieza de pan con relleno, tan característica de Playa Azul, y se
invitaría a la degustación pública. “Alcanzará para todos los turistas y más,
que hoy nos visitan”, dijo uno de los organizadores.
La
elaboración de esta gigantesca empanada requirió del apoyo oficial y de algunos
negocios comerciales, sin cuya contribución hubiese sido más difícil alcanzar
el objetivo, consideraron los participantes en la obra.
La
reina del Primer Festival de la Empanada de Playa Azul, Alejandra Anguiano
Espinoza, fue una de las principales testigos de la ardua tarea de armado de la
empanada, quien, al igual que otros visitantes, se paseó interesada por la
extensa columna de pan con relleno de dulce de coco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario