miércoles, 20 de julio de 2016

ZEE de Balsas, la más viable


Carta Blanca

ZEE de Balsas, la más viable

Ante la inquietante pregunta de si tendrán éxito las zonas económicas especiales proyectadas para tres regiones de México, se anticipa que quizá no todas ellas prosperen o por lo menos no todas se consolidarán al mismo tiempo. De la única que se puede adelantar que podría responder  más inmediatamente a las expectativas es la que corresponde a los estados de Michoacán y Guerrero, con su corazón muy próximo al Puerto de Lázaro Cárdenas, ubicado en el delta de la desembocadura del río Balsas en el Pacífico, del lado del primero de estos dos estados.
 
Y puede ser así porque, al final, quien determinará el éxito o el fracaso de estas zonas es el mercado y la inversión privada, sea nacional o extranjera.  El Puerto de Lázaro Cárdenas ya tiene la experiencia de cómo es que la fuerza del mercado marítimo fue la que decidió su despunte y no tanto las estrategias gubernamentales, las que, en su momento, intentaron privilegiar por sobre los reales intereses del mercado y por más de una década a su vecino, el Puerto de Manzanillo, en Colima, hasta que el peso de firmas navieras, terminaleras y del transporte eligieron por conveniencias de mercado y logísticas el ahora privilegiado destino de la terminal marítima michoacana.

Este mismo efecto puede actuar a favor de la que  bien puede llamarse  Zona Económica Especial del Balsas (por la definición de su ubicación geográfica), si se considera que aquí, en Lázaro Cárdenas, ya existe toda una infraestructura y disponibilidad de espacios y recursos naturales en un área geográficamente estratégica para el comercio nacional e internacional.

No quiere decir, por supuesto, que a la zona no le haga falta invertirle aún más en infraestructura adicional, incluido el rubro social, pero esa inversión sería la menos onerosa comparada con las otras dos proyectadas zonas económicas especiales, y esto lo debe tener ya bien observado el gobierno federal, para eventualmente centrar prioridades de inversión dentro de las tres zonas económicas especiales anunciadas.

Podría pensarse que la infraestructura adicional demandada tendría que cubrir una gran extensión, a partir de la idea de que las zonas económicas especiales cubren territorios que abarcan varios municipios, pero la realidad es que, al menos en el caso de Lázaro Cárdenas, la Zona Económica Especial del Balsas, estrictamente hablando, se asentará en un solo polígono de un número de hectáreas aún indeterminado, a partir del cual se generaría la expansión de la misma en términos de influencia económica y de desarrollo.

No hay comentarios: